Los niños tienen una forma muy particular de respirar la vida. Su energia es vital e ilimitada. Soñadora y cariñosa. Los niños vienen a cambiarlo todo aunque a veces no les dejemos hacerlo. Vienen a conquistar el mundo aunque no siempre puedan conquistarlo. Son desmedidos por defecto y la razon es que vienen a romper fronteras, patrones que ya no sirven para dejar una huella nueva que es unica y necesaria para este mundo tan diverso. Dicho asi suena muy lindo pero nos lleva a la siguiente conclusion.
No siempre los niños logran encauzar esa energia vital que traen por donde pueden crear su irrepetible huella en el mundo. Los padres li hacen lo mejor que pueden y saben y aun sabiendo mucho, pueden cometer pequeños errores del dia a dia que los niños traduciran como una carencia. Es por eso que todos llevamos un niño herido dentro. Puede que lo Unico que quisiera ese niño fuera que papa y mama lo miraran mas a menudo o simplemente pasar mas tiempo con ellos en vez de con los cuidadores. Puede que escucharas decir a menudo que no eras bueno para las artes o la musica y eso dejo una huella en ti. O tal vez escuchaste como decian que preferian niños a niñas y tu creciste queriendo ser lo que no eras para contentar a papa y mama. Son tantas cosas tribiales las que un niño puede magnificar y convertirlo en una herida, que es facil que nos hayamos convertido en adultos que contienen dentro un niño herido como las matrioskas rusas.
Y que hacemos para liberar ese folor que llevamos dentro? Pues eso, liberarlo porque en ocasiones lo ocultamos, lo tapsmos para que no se oiga. Lo negsmos porque asi creemos estar mas lejos del dolor. Y por ultimo nos inventamos una vida para contar a los demas sin ser conscientes de que estamos negando a ese niño que vive en nosotros. Algunas personas me preguntan que donde esta ese niño y aunque les cuente que vive con ellos, no dan credito.
Para mi fue inolvidable el dia que me encontre con mi niña interior. La encontre dentro de mis ojos, en el fondo de mi pupila. Esas pupilas que nunca miramos en profundidad. Nos miramos al espejo para peinarnos y maquillarnos pero nunca miramos al fondo de nuestros ojos. Pruebalo! Reconoceras a esa niña o niño que vive en ti y vas a ver que ya no podras olvidarla nunca. A traves de tus ojos te habla, te cuenta en que lugar se quedo y como puedes recuperarlo. Y una vez lo hayas encontrado, deberas cuidar de el o de ella porque son los guardianes de tu energia mas vital, mas creadora, mas alegre y amorosa. Habran dias que te sientas truste o apagado sin saber por que. Esa es la forma que tiene tu niño interior de llamar tu atencion. Te enviara señales de su viejo dolor para que tu lo disipes y vuelvan a reir juntos. Como lograr esto? Abrazando ese dolor como si fuera un bebe y diciendole que nada malo le va a volver a pasar. Que tu estas aqui para protegerle. Aunque la herida siga existiendo, el dolor ya paso y ahora eres un adulto conectado a esa fuerza creativa capaz de dejar esa huella en el mundo que solo puedes dejar tu. No se por que creo que solo podremos conseguirlo si en algun momento de la vida logramos conectar con ese dolor infantil que marco para siempre nuestro camino. Por mas que le intentemos quitar importancia con nuestra mente adulta, la realidad es que el subconciente no reconoce tiempos pasado presente o futuro. Para el, sigue ocurriendo la misma situacion, la misma palabra que te hizo llorar en tu niñez, cada vez que por alguna razon vuelves a vivenciar algo parecido. Cuidemos ese niño, para que sane su herida y vuelva a irradiarnos la alegria que le caracteriza, la energia mas sutil y mas bonita y mas que nada para sentir el camino que hemos hecho, de donde venimos, mirar las huellas que hemos dejado atras y las que estamos marcando en el presente. Que sean huellas propias, que abran caminos nuevos. Que rompan patrones como los niños, huellas unicas que no teman ser borradas, ni indiferentes. Huellas de vida, la tuya.
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