Lo que amamos lo salvamos

Esta mañana fue una tortolita  la que me inspiro a escribir esto. La vi metiendose en un arbolito con una rama en el pico, y pense q es una imagen que he visto dibujada, pintada, en peliculas o dibujos animados pero nunca habia contemplado en vivo. ¡Y me maraville de poder presenciar ese momento de llevar las ramitas a su nido!
Y eso me llevo a pensar en mi niño, ¡cuanto le gustaria verlo!
Como todo niño ve muchos animales en sus dibujos pero ¿cuantos les mostramos en la realidad? Y no me refiero a llevarlos a un zoo donde con toda seguridad no actuan de la misma manera que en libertad. Los animales, tambien nosotros, no somos los mismos si somos libres y nos sentimos presos o condicionados.
Y no somos conscientes de lo que , poco a poco vamos dejando atras y que es una riqueza incalculable. Tenemos que hacer un esfuerzo por salir de nuestras responsabilidades o comodidades, y llevar a los niños a que presencien la vida en su estado natural, no la vida ultracongelada y refinada que nos  vemos abocados a llevar.
 Ademas de llevarlos a la playa y de compras, llevemosles tambien al campo, a que vean de donde salen las naranjas, las uvas y las papitas fritas que tanto le gustan.
Mostrarles quien pone esos huevos que mama le pone en el plato. Y de donde sale esa leche que toma en las mañanas.
 Que los arboles de la iglesia de su barrio son casitas de cientos de pajarillos que protegen alli a sus crias. Buscar un nido para que vean la hermosura de un recien  llegado, que por otro lado nacen algo feillos! Jajaja.
 Recuerdo cuando era niña salir un domingo a coger castañas. Llegaba el invierno y muchas caian solas del arbol. Ahi supe que el fruto de las castañas estaba debajo de toda esa cubierta de puas. Mas de una vez llegaba a casa toda picada pero nunca olvide esos domingos ni de donde salian las castañas.
Los niños son asi, tal vez no escuchen todo lo que se les dice pero lo que exoerimenten nunca se les va a olvidar. Asi que, antes de que desaoarezcan tambien los santuarios de animales y las pequeñas fincas, en pro de la industrializacion, llevemos a los niños a ver como es una vaca de verdad, un cerdito como el de los cuentos, una cabra, una oveja o un caballo. El futuro de estas especies dependera de las proximas generaciones. Hagamos que amen a los animales para que se mantenga el equilibrio natural del planeta. Si hasta ahora nos hemos equivocado en algo, aun es momento de remediarlo.
 Por suerte ya hay muchas personas que dedican sus vidas a rescatarlos de la maldad humana, gente entregada a esa causa por entero y que difunden su mensaje por el mundo intentando crear conciencia planetaria. Se que la preocupacion  de todos ellos es que su labor siga adelante cuando ellos no esten. Es el caso de la cientifica Jane Goodall, que aun llegando a los noventa años, sigue dando charlas por el mundo dando a conocer esta realidad que casi siempre se oculta. Busquen informacion sobre ella y quedaran maravillados.
O del santuario Gaia, que nos coge mas cerquita,dirigido por dos seres increibles que entregan todo su tiempo y sus ganas al rescate de animales.
 Alli podemos ver animales  de granja en total libertad. Hay que llevar a los niños a estos lugares ademas de al cine y al parque. Es esencial que haya amor para salvar algo o  a alguien. Hagamos crecer ese amor en ellos, son el futuro.