Voa borboleta

Voa borboleta
En la creacion, cada flor coopera formando parte del jardin

viernes, 12 de noviembre de 2010

Amar desde la libertad

Esta semana he acudido  a unas jornadas de sensibilización que ha organizado el ayuntamiento de mi ciudad y la verdad es que ha sido muy gratificante. Salí de las ponencias muy identificada con todo lo que allí escuché. Muchas veces me he sentido un bicho raro por tener una forma de querer tan diferente al resto o al menos a la mayoría. Ahora sé que el hecho de no encontrar mucha gente que  comparta tus ideales no quiere decir que lo que piensas sea un despropósito o una locura. Los psicólogos y pedagogos que participaron  en las jornadas hablaron del amor universal, equiparándolo al amor de pareja e incluso hicieron hincapié en algo que yo comento mucho que es que no se puede vivir pensando únicamente en tu pareja. Cada uno tiene que tener un espacio propio y decidir quién quiere que entre en él, sin que ´le debas obligación alguna a la persona que vive contigo. Por otro lado, a casi todos nos educan bajo unos tópicos determinados, como son que siempre hay una media naranja para ti , que existe el príncipe azul y que lo deseable y lo esperado es encontrar esa persona que te complemente......en todo. Es casi imposible, yo diría que imposible e impensable. Ninguna persona puede llenar todos los huecos vacíos de otra por mucho que la quiera. Pero crecemos pensando que es así y nos pasamos media vida buscándola y la otra media decepcionados porque la persona que encontramos no cubre esas espectativas. ¡Pero ní esa persona, ni nadie! Queremos a toda costa que encaje en el perfil que nos han vendido, que nos quiera, que nos traiga regalos, que esté siempre impecable, que ayude en casa, que juegue con los niños, etc,etc. o sea, un super héroe o algo así. Y ellos no se quedan atrás. Quieren una mujer deseable, ama de casa, comprensiva. dócil, y que haga la comida con tacones y pintada como una puerta. Luego el tiempo te demuestra que eso es una falacia que te han vendido toda la vida, a través de tu educación patriarcal, de las pelis, de la publicidad, de la televisión en general y de escucharlo en casa, en el colegio y en fín, en todos sitios. Y es que aunque la evolución nos ha llevado a este estado actual que vivimos de "igualdad"  y  de desmitificaciones, a nivel emocional seguimos siendo muy analfabetos. Seguimos una conducta aprendida y es difícil "desaprender lo aprendido". No nos han eneñado a querernos, o al menos a querernos bien y actuamos como si nos hubiesen incorporado un microchip que no nos deja libertad para elegir nuestro comportamiento. No queremos como nos quieren sino como aprendimos y eso es un gran problema en las relaciones personales, que a su vez se convierte en un problema social. Hay una realidad social que es la ola de violencia de género que nos invade a diario como resultado de esto que digo. Debemos aprender a querer y a decir lo que queremos decir, sin miedos y sin reparo. No te quiere más aquel que te cela hasta la médula y que te hace volver a casa a cambiarte de ropa porque según él no vas de forma apropiada. Tampoco creo que todo el mundo tenga que tener como meta casarse, convivir tener hijos, el mejor coche y la mejor casa. No podemos seguir transmitiendole a nuestros hijos que el fin de la vida es eso porque no es así. Ante todo, somos personas, antes que ninguna otra condición y no podemos olvidar esto en aras del matrimonio, la homosexualidad, un buen status social o lo que sea. Creo que estamos viviendo cada vez una vida más acelerada y nos estamos olvidando de lo esencial. La sociedad nos crea imágenes y mensajes subliminares para que los imitemos. Lo peor llega cuando no logramos imitarlos y bajo la frustración nos volvemos temerosos,débiles, manipuladores,mentirosos o en el peor de los casos, terroristas emocionales, amargándoles la vida a los demás. No nos dejemos vender la moto esa de que el amor es querer tener a la persona amada todo el día al lado hasta asfixiarla. O que amor es aislarte del resto del mundo porque "con tu pareja nunca te aburres". No te engañes pensando que lo mejor que te puede pasar en la vida es "encontrar tu media naranja". Despierta,el amor es más que eso y no lo puedes limitar a una pareja. Y sobre todo, debemos aprender a interiorizar que amor, pareja y convivencia no tienen porqué estar siempre unidos, que es el cuento que nos han contado desde niños, creándonos una sensación de fracaso cuando no conseguimos tener las tres construcciones en una sola persona. En fín, que el príncipe azul me encanta pero también me encantan las sirenas, las hadas y los duendes y no por eso voy buscándolos cada día para incorporarlos a mi vida. Los dejo para mis momentos más infantiles cuando quiero viajar al país de los sueños.