A veces pienso en la muerte, ¿ustedes no?
Y lejos de paralizarme de miedo como hacia hace mucho tiempo, me lleno de paz.
Desde que nacemos sabemos que vamos a morir, solo nos falta saber cuando. Es por eso que hay que asimilarlo y pensar alguna vez en ello, en que' nos gustaria dejar y como nos gustaria que nos recordaran.Al fin y al cabo somos semillas que dejamos otras semillas para continuar nuestro legado, un legado de humanidad par el mundo.
En mi caso, que espero y deseo vivir hasta los 101 y mas, siento que mi semilla esta dando su fruto. Veo como mis hijas crecen y hacen sus vidas por si mismas, como han aprendido a soñar y a conseguir sus metas. Las veo madurar como un fruto de la vida que son, y pasar por experiencias parecidas a las mias en muchas ocasiones. En otras, son tambien maestras para mi que sigo aprendiendo de ellas como el primer dia que vi sus caritas.
Se que saben buscar en los lugares de amor y eso me llena de tranquilidad.
Por otro lado, dejamos amigos, grandes amigos con los que juramos envejecer juntos y esoero que asi sea. Ellos nos recordaran cuando ya no estemos como nosotros lo hacemos ahora con los que se han ido. Y eso me saca una sonrisa, porque se que seguire viva a traves de sus recuerdos, en la mesa, en la playa, en un musical, en un avion, en el cafe, seguiremos juntos aunque en distintos niveles.
Aqui quedaran nuestras frases famosas, nuestras rabietas y nuestros consejos. Todo volvera a florecer como una semilla que es cuando ya no estemos.
¿Has pensado alguna vez en eso?
Yo si. Muchas veces y las personas que se han ido me han enseñado que es lo que sigue.
Amo la vida pero se que un dia me ire. Cuando llegue ese momento sentire que mi vida no ha sido en vano. Y no lo habra sido porque cada dia intento hacer las cosas mejor que ayer y ser mejor persona, aunque muchas veces no lo consigo y lo hago muy mal, pero sigo intentandolo.
Al final lo que importa es la intencion que pongamos a lo que hacemos y no el resultado, que a veces se contamina por otros factores o se distirsiona. Asi que, como digo siempre: que me quiten lo bailao!